Proyecto: | Hospedería. Villafranca de los Barros, Badajoz. |
Cliente: | Privado. |
Concurso: | 2014. |
Arquitectos: | Spaniarq T10 Servicios de Arquitectura. |
Superficie: | 1040 m2. |
El edificio se emplaza en la parte delantera de la parcela, reservando así, la mitad de ésta para la ubicación de los jardines, resguardados del tráfico rodado de la futura carretera de acceso. Se situan dos viales de servicio en los márgenes laterales del solar, a través de los cuales quedan escondidas las entradas de servicio, al mismo tiempo que los aparcamientos reservados para los clientes de la hospedería, evitándose la común imagen,desordenada y confusa, de los automóviles estacionados en los frontales de este tipo de establecimientos. Obtenemos, con esto, una imagen continua y clara de la fachada principal de la hospedería, sin alteraciones de elementos secundarios.
Un gran hueco central en la misma nos indica el lugar donde se produce el acceso principal. Tras cruzar bajo el umbral de un poderoso dintel de hormigón donde se sitúa el letrero con el nombre de la hospedería, nos encontramos con un hermoso y amplio atrio descubierto de donde emergen noblemente cuatro palmeras en sus extremos. De este plácido espacio de transición (en donde, ademas, se podrían celebrar distintas actividades como recepciones, "cocktails", exposiciones al aire libre, etc..), encuentran su camino los distintos accesos independientes: de un lado al al salón de celebraciones y al aparcamiento de clientes, y de otro, en su parte superior, a la hospedería.
Ya en su interior nos encontramos con un vestíbulo de nobles proporciones sobre el que se asoman los pasillos distribuidores de habitaciones de las dos plantas superiores. Frente a la entrada, una pieza exenta que alberga la recepción y un pasillo de servicio con los despachos de administración y dirección. En los laterales de esta pieza se suceden dos salidas al jardín y dos núcleos de comunicación vertical. Las estancias principales de la planta baja: restaurante, cafería, salón social y spa, ocupan la totalidad de la fachada trasera, disfrutando todas ellas de las generosas vistas a los jardines. De otra parte, ocupando una franja longitudinal del edificio, se encuentran las distintas estancias servideras: almacenes, lavandería, salas técnicas de instalaciones, salas de personal y cocinas (situadas éstas entre el restaurante y el salón de celebraciones ya que ambas comparten esta zona de servicio).
Para el tratamiento de fachada se propone un sistema practicable de lamas de madera de orientación vertical, que permitan el control completo del soleamiento y las vistas. Este sistema de celosías consigue la imagen de una fachada homogénea, al mismo tiempo que flexible, atendiendo a la disposición abierta o cerrada que presenten los sucesivos paños de lamas. Otro aspecto, primordial en el diseño propuesto, que favorece esta variabilidad, radica en su elección cromática, de tonalidades ocres, propias de los vastos campos de cereales extremeños, y "barrosas", -rojizas-, tan características de los sustratos del fértil municipio que nos ocupa, villafranca de los barros.